La piedra de Septiembre: El Zafiro

Hay doce piedras natales para cada mes del año, tu mes de nacimiento determina cuál aplica para ti. Pero una piedra natal es mucho más que eso…

 Cada una de las doce piedras natales principales tiene diferentes características y cualidades – al igual que nosotros – y usarlas nos recuerda quienes somos y de dónde venimos, también nos inspiran a ser quienes queremos ser y a ir a los lugares que nos atrevamos.

El nombre zafiro proviene del francés medio y del latín, y se atribuye principalmente a la antigua palabra griega, sáppheiros, que significa ‘piedra preciosa’, aunque al final puede remontarse a la palabra en sánscrito, śanipriya, que significa ‘piedra de color oscuro’.

Este último punto de referencia nos permite dar un vistazo a los métodos generales de clasificación de piedras preciosas en la antigüedad: la palabra zafiro fue usada para describir cualquier piedra valiosa de color oscuro, usualmente el lapislázuli, la azurita o el corindón azul oscuro que tipifican lo que pensamos popularmente cuando vemos o escuchamos la palabra zafiro.

Sin embargo, lo que sabemos hoy en día, gracias a la gemología, es que los zafiros no se limitan únicamente a este color; de hecho, se encuentran en todos los colores del espectro visible – ¡incluso el gris!

El único color que no aplica a los zafiros es el rojo porque estos son rubíes (el zafiro y el rubí están en la misma familia – corindón).

Entonces, aunque la palabra zafiro se usaba en la antigüedad para referirse a una amplia gama de piedras oscuras (usualmente azules), hoy en día se usa para referirse a una amplia variedad de corindón de diferentes colores que incluye tonos naranjas, amarillos, verdes, púrpuras y, por supuesto, azules.

Historia del zafiro

Los antiguos persas conocían al zafiro como la ‘Piedra celestial’ y creían que el mundo descansaba sobre un pedestal de zafiro gigante que pintaba el cielo azul con su reflejo. El tema del zafiro como una conexión con lo divino y el cielo continua en toda la mitología griega y romana y en la cristiandad.

Los griegos asociaban al zafiro con Apolo, la deidad profética del Oráculo de Delfos. Los devotos que buscaban ayuda y consejo del oráculo usaban zafiros para ganar el favor de Apolo y abrir el ‘tercer ojo’, facilitando el entendimiento de la profecía. Asimismo, entre los antiguos griegos y romanos existía una creencia común que decía que usar zafiros protegía a su portador contra la envidia, la infidelidad y el peligro.

La biblia hebrea menciona explícitamente al zafiro 12 veces y relaciona esta piedra preciosa con dios y con la naturaleza divina.

Hay muchas ocasiones en las que los zafiros son puestos a los pies de dios, indicando que todo lo que dios hace se basa en el pilar de su divinidad, reflejando las creencias antiguas que la palabra era apoyada por un pedestal de zafiro.

Hay muchos que creen que las tablillas de piedra azul usadas para tallar los diez mandamientos eran zafiros y esta noción es respaldada por lo que conocemos sobre la dureza relativa del zafiro. En la escala de dureza Mohs, el zafiro tiene un 9, siendo un material ideal para tallar con un martillo o cincel.

Para el siglo 12, los zafiros se habían asociado estrechamente con el clero y los anillos eclesiásticos engastados con zafiros comenzaron a ser usados por sacerdotes y otros para simbolizar su conexión directa con el cielo. Un tipo especial de anillo eclesiástico tendría un zafiro estrella, porque se pensaba que los rayos de la estrella representaban la santa trinidad: el padre, el hijo y el espíritu santo. Otros cristianos llamaban al zafiro estrella ‘la piedra del destino’ y atribuían los tres rayos cruzados a la fe, la esperanza y el destino.

El simbolismo cristiano siguió permeando la relevancia cultural del zafiro hasta tal grado que durante la edad se pensaba popularmente que un recipiente hecho de zafiro mataría una serpiente venenosa si era metida dentro.

Hay muchos mitos y leyendas en torno al zafiro que se remontan a tiempos anteriores a los persas, los griegos y los cristianos. En la literatura védica hindú, considerada como la escritura religiosa más antigua del mundo, el Kalpavriksha (o árbol de la vida) supuestamente tenía frutos de rubíes, tronco de diamantes y raíces de zafiro. Esta metáfora parece ser un origen posible para los persas, los griegos y las iteraciones bíblicas del concepto del zafiro simbolizando una fuerza de apoyo que permea todo en el universo.

Otro mito antiguo proviene de la civilización Jemer, un pueblo que ocupó el actual Myanmar. Habla sobre la leyenda del sagrado de Birmania, una historia en la que el gato de un templo fue transformado en una encarnación divina de la diosa dorada llamada Tsun-Kyan-kse, cuyo rasgo característico eran sus ojos azul zafiro.

Un fascinante cuento persa sobre los hijos del rey Serendip (el antiguo nombre persa para Sri Lanka) relata cómo los chicos, quienes se pusieron en marcha para descubrir la realidad del mundo, encontraron una mina de zafiro. La leyenda relata el origen de la noción de serendipia – el acontecimiento y hallazgo inesperado de algo valioso que se produce de forma accidental.

En la actualidad, Sri Lanka sigue siendo uno de los depósitos de zafiro más importantes del mundo. La mayoría de los zafiros del mundo provienen de los territorios australianos de Queensland y Nueva Gales del Sur, Sri Lanka, Madagascar, Tailandia, Norteramérica, Tanzania y otros países africanos.

¿Cuál es el significado de la piedra natal de septiembre?

El zafiro simboliza la nobleza, la verdad, la sinceridad y la fidelidad; de allí su antigua apropiación con la realeza, quienes deseaban personificar y ejemplificar esas virtudes. Además, se cree que el zafiro otorga los dones de la satisfacción, la alegría, la prosperidad, la paz interior y la belleza.

Tradicionalmente, el poder de ofrecer armonía entre los amantes, así como paz entre adversarios, era atribuido al zafiro. Adicionalmente, se dice que los zafiros ofrecen tranquilidad a su portador en situaciones sociales incomodas, y también ayudan a revelar engaños. Cualquiera involucrado en una cuestión legal podría beneficiarse del zafiro.

En la astrología, el zafiro azul está conectado con el planeta saturno y con el sábado, mientras que el zafiro blanco (o incoloro) está asociado con venus y representa el viernes, el día dedicado a ese planeta.

El simbolismo del zafiro también se extiende a la primavera, y en diferentes sistemas zodiacales, la piedra preciosa cubre a tauro y géminis.

Hoy en día, el zafiro sigue siendo una piedra de sabiduría, aprendizaje, agudeza mental y activación psíquica. Su color azul puro es asociado con el orden y la sanación de la mente, otorgando fortaleza y concentración y la capacidad de ver verdades para utilizar ese conocimiento. El zafiro azul representa los chakras de la garganta y el tercero ojo, los cuales son las bases de la comunicación y la consciencia, respectivamente.

Se cree que meditar con un zafiro en tu mano puede ayudarte a conseguir inspiración e ideas que apoyen tu creatividad y expresiones de poder. Quizás es por esto que muchos creadores y artistas prefieren las propiedades y los efectos del zafiro.

La noción del anillo de compromiso con un zafiro, el cual simboliza sinceridad y fidelidad, se hizo popular en 1981 cuando el príncipe Carlos le dio a la princesa Diana un anillo de compromiso con un zafiro azul que ella usaba mientras cautivaba al mundo. Hoy en día, ese anillo es usado orgullosamente por la novia del príncipe Guillermo, Kate Middleton. Muchas celebridades, incluyendo Penélope Cruz y Elizabeth Hurley, han seguido esta moda de usar un anillo de compromiso con un zafiro, casándose con las antiguas virtudes que simboliza esta piedra preciosa.

Propiedades curativas de los zafiros

Cuando se habla del zafiro como la piedra natal de septiembre, se cree que esta piedra preciosa tiene el poder especial de proteger a los nacidos en septiembre.

El zafiro protege a los nacidos este mes contra los pensamientos negativos y ofrece una estructura positiva y orden a sus vidas.

El zafiro posee potentes propiedades protectoras que resuenan en esferas sagradas; prácticamente todas las religiones del mundo hablan de la piedra natal de septiembre con respecto y admiración. Esto lo convierte en un excelente talismán protector, especialmente cuando hay un riesgo de ataques psíquicos, mentales o emocionales.

Esta gema preciosa fortalece y despierta el vínculo entre el Yo superior y el Yo físico. Usar joyería con zafiros con frecuencia te ayuda a desarrollar un vínculo fuerte con tu equipo espiritual, incluyendo curanderos, guías espirituales, ángeles guardianes e incluso seres queridos fallecidos. Puede ayudarte en tiempos de cambio ofreciéndote las visiones claras que necesitas para alcanzar tus sueños y cumplir tus objetivos. El poder del zafiro para transmutar los pensamientos negativos y la energía también hace que sea muy efectivo para la sanación de los chakras.

Respecto al zafiro y la salud física, el zafiro acelera todos los proceso curativos al influenciar la voluntad de mejorar.

Cuidados para tu piedra natal de septiembre

Con una calificación de 9 en la escala de dureza Mohs, el zafiro es la piedra preciosa más dura y durable después del diamante. Tiene una excelente resistencia y cero clivaje, la cual es la tendencia a romperse ante los golpes. Esto la convierte en una excelente elección para anillos y otros engastes de uso diario.

Sin embargo, la piedra requiere de ciertos cuidados para evitar el desgaste constante que puede experimentar después de su uso diario.

No necesitas limpiadores especiales para joyas ni tienes que brillar la piedra para remover la suciedad de tu zafiro. Todo lo que necesitas es agua tibia para lavar la pieza, un cepillo de dientes suave y un detergente lavaplatos